Tenistas españoles por el mundo

 Viaje desde Guayaquil a Indian Wells


       La gente se piensa la suerte que tenemos porque siempre estamos viajando, de conocer muchas ciudades y hacer turismo...

        Pero lo que la gran mayoria no sabe es que prácticamente no vemos ni conocemos nada, yo he estado en ciudades preciosas de las que sólo he visto el hotel y el club y algo de lo que puedo ver en el trayecto que recorro del club al hotel o viceversa. Es increible lo rápido que pasa el día, nos pasamos la mayoría del tiempo en el club, normalmente hacemos doble sesión de entreno, algo de gimnasia, masaje, preocuparte de buscar a alguien para entrenar al día siguiente, coger pista, en fín, una rutina diaria que lleva tiempo y claro, cuando llegamos por la tarde al hotel, lo que menos nos apetece es ir a ver algo, primero porque estamos cansados y segundo porque si jugamos al día siguiente, tampoco podemos estar pateando por la ciudad porque puedes cansarte para el día siguiente, que volvemos a entrenar o tienes partido y así día tras día...


          Lo que tampoco sabe la gente es lo largos que son los viajes, la cantidad de escalas que hay que hacer para llegar de un sitio a otro, ya que no siempre hay vuelos directos, por poner un ejemplo, mi viaje de la semana pasada fue este: estaba en Salinas (Ecuador) el sitio estaba a 2 horas del aeropuerto de Guayaquil, volaba el viernes a las 15.35 horas y como Manolo se iba el jueves por la noche, aproveché para hacer con él, Salinas- Guayaquil, dormí en Guayaquil, al día siguiente fui al aeropuerto sobre las 13 horas, facturé las maletas y ahí empezaba mi odisea de viaje, no había buena combinación y tuve que volar de Guayaquil a San José de Costa Rica, el vuelo duró una hora y media, hicimos 50 minutos de escala y nos metieron en otro avion rumbo Guatemala, este vuelo duró una hora y cuarto, otra escala de 1 hora  y de nuevo a otro avión de 5 horas a Los Angeles, a todo esto hay que sumar la gran pasión que tengo por volar y más con una compañia (Lacsa) q nunca había oido y la verdad, iba aún más tenso de lo normal, luego por suerte resultó que los aviones estaban muy bien y eran bastante buenos, asi que eso me tranquilizó, jejejeje.


          Pude dormir un poco en alguno de los aviones y me pasó una vez que no sabía ni a donde estaba volando, si ya iba en el ultimo vuelo o aún me quedaba otro, por desgracia para mí, aún no era el último, jejejejeje, aún me quedaba el de Los Angeles...
        Por fín llegué a Los  Angeles a las 11.40 am, por suerte pasé rápido la aduana y me fui al hotel, me costó bastante dormirme, estaba cansado de tanto viaje y lo peor de todo es que aún no había llegado a mis destino, me quedaba alquilar un coche y conducir 2 horas a Indian Wells, que es mi próximo torneo, encima tuve que madrugar ya que entrenaba a las 13 horas con Amer Delic y luego de 2 a 3 con Rik de Voest, la 2a parte del ultimo de entreno se me hizo dura, pero bueno, así me lo quitaba de encima y me podía ir al hotel a descansar cuanto antes.


       Así que como norma general nos pegamos unos viajes que no veas y tampoco vemos muchas cosas, la gente me dice:¿ por qué no te quedas un día más y ves algo? y yo les digo: ese día que me quedo y no vuelvo a casa, igual me hace empalmar con otro torneo y ya no me da tiempo a volver a casa y haría muchas semanas seguidas y sí, es muy bonito viajar y jugar al tenis, que me encanta, pero aunque sea, sólo estar un día en casa y con los tuyos, se agradece mucho, te hace recargar pilas y desconectar para volver con fuerza a otro torneo.


   Un saludo

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